El diseño cambia a las personas y la forma en la que nos relacionamos y vivimos ¿O es al revés? Este centro parroquial ha sido reformado pensando en re-conectar con su comunidad y el entorno a través del diseño.
Como os decíamos en la cabecera de esta entrada de blog, estos salones parroquiales ubicados cerca de Mislata han sido transformados recientemente. Y es que, la congregación que desempeña labores aquí se dio cuenta de que necesitaba urgentemente un nuevo lugar donde continuar ayudando a su comunidad. Con la premisa de modernizar sus salones de la década de los 60.
60 AÑOS DE PASILLOS
1964, casi 60 años entre los tabiques de esta planta baja. Lo que encontramos en su interior son elementos constructivos que, pese a tener un nivel de conservación aceptable, precisaban de una modernización. Por una parte, la distribución era la tradicional de los edificios de la época de finales de los 50 y principio de los 60 ¿La conocéis? Por sino os viene a la mente pensad en la casa de vuestra abuelita. Seguramente sea compartimentada. Con abundancia de tabiquería en ladrillo y con poco o escaso nivel de aislamiento, y con unas instalaciones poco eficientes. En cuanto a los acabados, tipo espartano. Es decir, materiales que fueran relativamente contenidos en precio y con una gran capacidad de aguantar el trasiego de los años.
UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD
El estudio de arquitectura encargado del proyecto, y con el cual contamos con otras colaboraciones. Se encargó de diseñar un espacio cuidado, abierto y donde las zonas comunes tuvieran la importancia que se merecen en proyectos como los que se llevan a cabo entre sus paredes Para ello, necesitábamos de unas buenas jornadas de derribos que nos permitieran acceder a las instalaciones para modernizarlas y a su vez nos permitiesen hacer los espacios más diáfanos.
Los tabiques autoportantes, muy extendidos a día de hoy por sus múltiples ventajas, cobran importancia y nos ayudan a dibujar las líneas de este espacio. El objetivo de esta nueva redistribución de los salones es ganar en sensación de amplitud, en calidez y en confort según los estándares actuales.
UN FUTURO LLENO DE DISEÑO
Empezaremos de dentro a fuera. Con la distribución replanteada y ejecutada. Y con la modernización de todas las instalaciones de luz – agua pudimos dar paso a la fase de acabados.
Para asegurarnos de que estos salones dejaban atrás la oscuridad característica del pasado optamos por paredes pintadas en blanco y unos amables revestimientos en gres de gran formato tono beige para los suelos. Esta, es una combinación perfecta para atraer y retener la gran cantidad de luz que entran por los nuevos ventanales.
Luminoso y con sensación de amplitud pero nos falta algo ¿No? Para que los salones trasmitiesen esa sensación de hogar, de acogimiento y de calidez necesitábamos de las virtudes de la madera natural. Este material lo tenemos presente tanto en es listonado de madera de la entrada, o como en las puertas escamoteables que conectan las zonas entre sí. Aquí, el trabajo de carpintería tuvo una gran importancia ya que tuvimos que hacerlas a medida para las necesidades de nuestros clientes. Por suerte, contamos con un compañero especializado en diseño de mobiliario e interiores.
Y ya, finalmente llegamos a la calle para comentaros el último detalle de diseño. Antaño, la fachada de este edificio lucía con un aspecto robusto pero poco atractivo. Sin embargo, con los trabajos de carpintería metálica pudimos dotarle de una mayor importancia gracias a su fantástico diseño negro. Os dejamos el vídeo del final de obra ¡Esperamos que os guste!
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